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Brotes, la magia de despertar una semilla

Brotes, la magia de despertar una semilla

Por Tomás Calderón, Ingeniero Agrónomo 

La técnica ancestral de la germinación puede contribuir directamente a mejorar tu bienestar y salud, tu relación con la naturaleza, tu desarrollo personal, mejorar la sostenibilidad del medio ambiente, impactar en la seguridad alimentaria y nutricional.

Quiero que descubras el gran poder que encierran estas pequeñas creadoras de vida y experimentes una práctica ancestral muy utilizada por pueblos originarios que lograron descubrir que en la semilla se encuentra una poderosa herramienta de curación y sanación del cuerpo físico y del cuerpo espiritual llevándonos al más íntimo contacto con nuestro cuerpo, la naturaleza, y con las fuerzas que sostienen la vida.

Cada semilla que despertamos tiene el potencial de crear una nueva planta, una nueva vida y transferir toda esa energía vital al cuerpo humano.

Los brotes y la alimentación viva

La alimentación viva es mucho más que consumir alimentos crudos. Por un lado, incluye los fermentados que tienen una gran cantidad de bacterias vivas benéficas para nuestro cuerpo; y por otro lado, las semillas que están en estado de germinación, es decir, brotes, germinados y microgreens.

La fermentación fue desarrollada y practicada por el hombre para conservar los alimentos, y por consecuencia, a través del proceso de fermentación se producen una gran cantidad de probióticos que ayudan a mejorar nuestra microbiota intestinal.

La práctica de la germinación hace una diferencia tanto en su propósito como en su funcionalidad, ya que su utilización está centrada en adquirir una fuente nutricional excepcional de rápida y permanente disponibilidad. Además, es muy utilizada como una potente medicina, a nivel físico y espiritual. Uno de los usos más potentes y de mayor funcionalidad es que si aprendes a despertarlas conscientemente se vincularán contigo, y serán un puente de conexión entre tu cuerpo y las fuerzas de la naturaleza. Si conoces y dominas bien el arte de germinar semillas podrás volver a conectar con la cocreación y despertarás a la sanadora y el sanador que todos llevamos dentro.

La práctica de la germinación

La germinación es uno de los fenómenos más fascinantes de la vida, dado que, a partir de una minúscula semilla, nace rápidamente una planta con propiedades inimaginables.

Cada semilla contiene una energía potencial capaz de convertirla en una planta 1000 veces más grande que ella y cuando esta fuerza se activa con la germinación, podemos encontrar en este alimento todo su potencial nutritivo.
Es maravilloso tener la posibilidad de despertar esa Vida latente y lograr transferir su energía vital a nuestro organismo.

Te imaginas un multivitamínico y una medicina 100% natural, bueno eso son las semillas germinadas, son pequeñas plantas en su primera etapa de crecimiento que tienen un inmenso poder que se incrementa hasta el mismo minuto de su consumo.

Brotes, la verdadera revolución verde

Los brotes son revolucionarios porque...

1. Multiplican los nutrientes

Una de las propiedades más reconocidas por los brotes es la capacidad de aumentar la biodisponibilidad de los nutrientes, vemos que se ven multiplicadas las proteínas, vitaminas, minerales, oligoelementos, aminoácidos, enzimas, "fitoprotectores y una serie de sustancias que nos ayudarán a mejorar nuestra nutrición y salud a nivel celular, de órganos y de sistema.
La germinación permite que las macromoléculas complejas que no podemos digerir de las semillas “dormidas” se degraden y pasen a ser moléculas más simples y completamente asimilables y digeribles por nuestro cuerpo.

2. Multiplican el alimento

Cuando germinamos nuestras semillas, el peso de estas puede aumentar hasta 12 veces o más en algunas variedades. En pocos días puedes pasar de un simple puñado de semillas a tener una cesta llena de alimento. Esta característica era una de las razones de la utilización de la práctica en tiempos de escasez de alimento.
Por ejemplo, imaginemos que usamos un kilo de semillas de lentejas. Pero si decidiera germinar estas semillas, al cabo de siete o nueve días, obtendría alrededor de diez kilos de alimento. Es decir, ¡multiplicamos el alimento!

3. Están disponibles 24/7 y en cualquier lugar

La práctica de germinación nos permite contar con un alimento fresco todos los días del año sin tener que estar preocupados por la época, el clima y el lugar o espacio donde nos encontremos. Incluso si vives en un departamento pequeño, de todas formas podrás cultivar tu propio alimento vivo, sin requerimientos de tierra ni de recursos energéticos. Sólo necesitarás un par de recipientes y agua.

4. Facilitan tu personal y espiritual

Si lo deseas, también puedes aprender a usar esta herramienta para comenzar una íntima relación con las fuerzas que rigen la vida y desde aquí comenzar a materializar tus objetivos de vida junto a la madre naturaleza que se estará expresando dentro de ti.

5. Unen a la familia

Germinar y dar vida a las semillas son prácticas fascinantes si las llevamos como una actividad en familia. Es maravilloso cultivar tu propio alimento en familia.
Muchas semillas son muy fáciles y rápidas de germinar y los niños tendrán un éxito seguro en su producción.
Se genera el sentido del autoabastecimiento, mejoras la salud de tu familia, ayudas a la economía en el hogar y generas un hermoso vínculo con la naturaleza y la vida.

Si quieres aprender a germinar semillas y hacer tus propios brotes, mira nuestros próximos talleres en nuestra sección de BIENESTAR.

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